Esta rubia caliente no parece haber tenido suficiente con las folladas intensas que su amigo le ha regalado durante toda la noche. Se despierta con ganas de mas y se empeña en hacérselo saber al chico. Le sirve el desayuno en zapatos de tacón, lenceria y con una clavija anal metida en el culo. Menuda viciosa es!